Pasa al interior y ponte cómodo

4.7.10

Niños raros

Niños raros es un álbum ilustrado de Vacas e Hijo editado por SM. La idea original del libro es de Tomás Hijo, buen amigo escritor e ilustrador, quien pensó en un abecedario ilustrado con una serie de niños con alguna cualidad o característica extraña; niño raros, en definitiva. A esa conclusión, la de que hay niños raros, debió de llegar José María Gabriel y Galán cuando escribió los versos que hemos incluido como cita en el libro: “Al ver ciertos niños / me digo yo a veces: / mamíferos, aves, / reptiles y peces".
Tomás esbozó los personajes y les dio movimiento, yo les puse voz y escribí sus historias y Tomás, de nuevo, integró texto e imágenes.
Por la pasarela del libro desfilan el niño alga, la niña de espuma (que podéis ver en la ilustración), la niña cacto, el niño queso, el requeteniño, la niña sombra, el xilofoniño.
Cada imagen va acompañada de un texto que nos acerca al personaje o recrea algún episodio de su vida. El libro cuenta con un romance, un soneto con eco, un poema escrito en versos de cabo roto, una cuaderna vía, un ovillejo... Uno de los objetivos del libro es que sirva a los maestros y a los padres para conocer y trabajar diferentes estrofas o recursos métricos o estilísticos. Este, además de su calidad, es uno de los atractivos del libro.
Creemos que es un buen trabajo, con muchos aciertos en la parte gráfica (la composición, el uso de la tipografía, el manejo de registros y texturas y un acabado muy personal) y en el texto (el ritmo, la musicalidad, la variedad de recursos, el humor y el juego, entre otros). Ilustradores de la talla de Antonio Santos o escritores para niños como Antonio Rubio le han dado su visto bueno y han valorado con éxito el trabajo.
Niños raros es asimismo un homenaje a Los niños tontos de Ana María Matute, al "niño zurdo" de Eduardo Polo y al Romancero de niñas de Luis Cané pero sobre todo a dos niños muy especiales: Arturo y Jia.
Ojalá que este curso podamos ver a los niños raros matriculados en muchos colegios, recorriendo las mesas de las bibliotecas y en las estanterías y habitaciones de muchos hogares.

¿Quién de vosotros no fue un niño raro? ¿Quién sigue siéndolo aún?

El viernes nos juntaremos tres niños raros para hablar de un libro imprescindible en nuestras bibliotecas: Niños raros

Raúl Vacas, poeta raro
Tomás Hijo, escritor, profesor e ilustrador raro
Isabel Sánchez, lectora y bibliotecaria rara

Tres “rara avis” que nos hablaran de lo raro que resulta no leer poesía en estos tiempos

En Letra Hispánica, Calle Peña Primera, 18.
El viernes, 21 de octubre, a las 20,00 h.


Aquí tenéis a la Niña de Espuma, para abrir boca:



(Pincha en la imagen para ampliar)

Romance de la niña de Espuma

Escuchen bien los infantes
de aqueste noble lugar
la historia que aquí les traigo
de la niña Mari Mar.
Era la niña de espuma
desde su llanto inicial
limpia como el agua clara,
jamás hubiera otra igual.
Sus ojos eran burbujas
de suavizante mirar,
su cabello un espumaje
de algas y de coral.
De espumillón era el talle,
de gomaespuma su andar,
de jabón eran sus besos,
de pompas el suspirar.
Gustábale, en el verano,
pasear junto a la mar,
caminar sobre las olas
y dejarse salpicar.
A una fiesta de la espuma
con un mozo fue a bailar
y entre pitos y entre flautas
se enamoró Mari Mar.
Y aquel mozo, que era limpio,
y le gustaba fregar,
con mucha pompa y boato
prometióla desposar.
Con un gran velo de espuma
que ella mandara bordar
el padrino, de su brazo,
condújola hasta el altar.
Fueron días de perdices
y sueños por conquistar,
hasta que el mal una noche
quiso a su puerta llamar.
Cuando la niña en la ducha,
se acabó de enjabonar,
el tapón de la bañera,
solo se fue a destapar.
La niña por los desagües
que van a dar a la mar,
se perdió sin que el marido
pudiérala rescatar.
Cuánto lloró aquel buen mozo,
cuán hondo fue su penar,
aquel extraño suceso
nunca se llegó a aclarar.
Desde ese día el esposo
de la santa Mari Mar,
trabaja en las pompas fúnebres
pues no la puede olvidar.
Aquí se acaba la historia,
justo es recomendar,
que –como crece la espuma,
y al rato vuelve a menguar–
es preciso, si felices,
no dejar de vigilar
el tapón por si el destino
quisiéralo destapar.

2.5.10

Presentación Por favor, sea breve 2

El viernes, 7 de mayo, se presenta en la Biblioteca Pública de la Casa de las Conchas de Salamanca el libro POR FAVOR, SEA BREVE 2 (Antología de microrrelatos), edición a cargo de Clara Obligado y con prólogo de Francisca Noguerol.

El acto será a las 20,00 h. en la Sala de Exposiciones.




En la contraportada del libro, editado por Páginas de Espuma, figura el siguiente texto:

Este libro bulle, está vivo, da cuenta de la última creación, de lo que se está haciendo ahora, en este minuto, en todo el ámbito hispanoamericano, de orilla a orilla. Contiene
casi doscientos microrrelatos, formados tanto por obras de autores novísimos como por inéditos de los grandes.
Es un libro taller de escritores, un libro descubrimiento, un libro cazador de dinosaurios, un libro que sigue a otro libro de referencia, el Por favor, sea breve, cuya larga aventura nunca imaginamos. Sumérgete de nuevo en unas páginas que crecen y crecen para el placer de lectores quienes, en pocas líneas, son también capaces de bullir bajo estos diminutos remolinos de palabras.


Participan en la presentación y la lectura de textos:

Clara Obligado, escritora y responsable de la edición
Francisca Noguerol, profesora y autora del prólogo
Encarnación Molina, de Páginas de Espuma
Raúl Vacas, poeta
Javier del Pino, piano

2.4.10

Bubisher

Por fin llegó el día.
Mañana Isabel, Miguel (mi cuñado) y yo saldremos para Tinduf (Argelia) a pasar siete días en Smara como voluntarios del BUBISHER (el pájaro que trae la buena suerte), un bibliobús para los campos de refugiados saharauis.
Nuestra labor consistirá en desarrollar un taller para niños y maestros en las escuelas y en el bibliobús. El título de dicho taller es Almar la mar y contiene cinco capítulos: Imaginar el mar, Soñar con el mar, Dibujar el mar, Escuchar el mar y ¡Mar a la vista! Cada capítulo contiene diferentes dinámicas de trabajo, así como alguna propuesta visual y varios textos de apoyo.




Almar la mar, tal y como señala Isabel Castaño, en el inicio de la guía didáctica es:

Un taller para descubrir la mar, reconocerla y
recuperarla a través de los sentidos y las palabras
hasta conseguir:
Buscar con la mirada su horizonte y comprobar su
redondez.
Unir las dos orillas con la mente.
Bañarse en la más fresca.
Imaginar su hondura y transparencia.
Saborear su brisa y separar sus ingredientes para
degustarlos poco a poco: la pez negra, el agua
clara, la sal blanca, las algas verdes y rojas, el
yodo de sol naranja, la carne azul del pescado y
sus escamas de cien colores.
Hundir las manos en la arena y escurrir el tiempo
entre los dedos, aguantar el tacto de las algas en
los pies, cavar un pozo con las manos hasta llegar
al brote del agua, dejar que mane y flotar en
ella panza arriba.
Escuchar el sonido de las caracolas, los niños en
la playa, las olas al romper, el agudo grito de las
gaviotas, el bullicio del puerto, el crujido de las
barcas y el roce de sus redes.
Recuperar la mar, amarla y almarla. Poblar la mar.

Los objetivos del taller son:

1. Recrear el mar a través del juego, los sonidos, la poesía visual, la imaginación,
los sentidos y la oralidad; y proporcionar al maestro o al voluntario
una guía de trabajo para completar el taller durante el curso.
2. Conducir al niño hasta el mar, a través de la lectura y la escritura mediante
un lenguaje sencillo, con pequeñas sorpresas que retengan su atención
y propuestas visuales atractivas y fáciles de comprender.
3. Favorecer la comunicación y las relaciones interpersonales a través del
diálogo, la creatividad y el juego.


Este blog quedará más desierto que nunca pero a nuestro regreso haremos una crónica detallada de la experiencia. Para cubrir esta larga ausencia dejo un verso de Rafael Pérez Estrada, de su libro Crónica del mar como fondo de pantalla.

"El mar es infinito y empieza en la esperanza"


28.2.10

Galicia Calidade

Hace unas semanas estuve en Sanxenxo y O Grove. No había vuelto por allí desde que fui a limpiar chapapote. Entonces escribí un artículo de opinión que titulé “Negra Navidad”. Decía así:

Como nuestras vidas son los ríos –según Manrique- que van a dar a la mar que es el morir, yo he decidido comenzar el año envuelto en chapapote.
A mi lado están José y Javier, de Zamora; Gustavo, de Brasil; Isabel (mi mujer), Julián y Lorenzo, de Salamanca, y otros tantos voluntarios apurando la noche de Galicia, más negra que nunca. Aquí la estrella de la Navidad sabe a cerveza, José es un percebeiro que se juega la vida, María es voluntaria de la Cruz Roja y los Magos son bomberos con grandes capazos llenos de un regalo más valioso que el oro, el incienso o la mirra: el esfuerzo.
Se hace duro el contraste de este folio tan blanco donde escribo y el color de la playa, negra como febrero, cargado de exámenes.
Con los pies en el agua, enfundado en el mono, juego a ser el niño que quiso vaciar el mar con su cubo y su pala de juguete.
No sé si tanto esfuerzo servirá de ejemplo para quienes piensan que el mundo se quedó sin utopías. Para que aquellos que no creen en la voluntad del hombre recobren la esperanza que nunca tuvieron. Para soñar tan alto como las cometas blancas.
Mi afán no es otro que el calzar mis botas de siete leguas y pisar donde otros muchos ya pisan. Sentir que la vida tiene sentido cuando te das a los otros con todo lo que tienes. Cuando abandonas tu casa para pasar tus vacaciones con otra familia.
Y aquí hay tiempo para el trabajo y la amistad. Para creer en la vida, tan vulnerable a veces. Para crecer tan alto como los eucaliptos. Para pensar en Beppo, el barrendero de Momo, que barría a diario una calle muy larga, siempre con el mismo ímpetu. Paso, inspiración, barrida.
Hace unos días al calor del hogar y del año viejo y ahora en el final de la tierra, estas letras llenas de buenos deseos para otros. De sueños replantados en el Nuevo Año. De países de Nunca Jamás. De pretéritos imperfectos. De presentes simples y de futuros perfectos.

Esta vez pude disfrutar de un mar azul y limpio, lleno de adioses y de olas, de gotas de sal, de rayos de lluvia. Y respiré hondo, frente a la Lanzada, para volver tierra adentro cargado de suspiros oceánicos.
Fui con la intención de contaminar de poesía a los chicos gallegos y compartir con ellos todo lo que he sido, soy y seré gracias a las palabras.
Disfruté mucho en el IES Sanxenxo, de la mano de Loli y Ricardo que me acogieron en su casa como uno más de la familia. Pero también con Juan, profesor de Historia, con quien comparto el sentido de la enseñanza y de la vida, más allá de las pedagogías convencionales.
Los chicos lo pasaron bien y se fueron del taller con una visión de la poesía más cercana y menos académica. Ahora, según Loli, están recogiendo algunos frutos.
Esto es lo que escribieron en el blog de la Biblioteca de su instituto

Muchas gracias, chicos. Sentí no poderos firmar a todos vuestro libro o cuaderno de apuntes. El tiempo se nos echó encima y aún teníamos mucha jornada por delante. Que cada cual anote un sueño o un deseo en esas páginas y lo consuma de modo preferente.

Por la tarde, hice un taller en el IES de Bizocas, un instituto que comparte bosque y mar, y cuenta con unos chicos comprometidos con la poesía y una profesora (Nieves) a su medida. Luego, tras el taller, me reuní con el Club de Lectura del IES Sanxenxo. Fueron dos largas horas cocinando y degustando todo tipo de poemas. Una cebolla, un verbo frito, un bollo maimón o un cocido de ceros sirvieron para compartir poesía y conversación. Todo muy de andar por casa y con un cariño y un trato especial. Gracias, Ana, Loli y Juan por tan grata experiencia, resumida brevemente en el blog del grupo.

También estuve en el IES Vilalonga, con Elisa, una profesora entregada a su labor y a la biblioteca, que hizo posible mi viaje a Galicia y sirvió de enlace y celestina con los otros centros.
Allí, en el Vilalonga, disfruté con jóvenes y profesores la poesía de Garcilaso de la Vega (el centro me solicitó a través del programa de fomento a la lectura “Por qué leer a los clásicos” del Ministerio de Educación.
Después hice un taller de poesía con chicos de 4º de ESO que resultó vibrante. Tal vez uno de los talleres con los que más he disfrutado en los últimos años. Se nota que en Galicia hay calidad y que se trabaja bien en torno a las bibliotecas escolares. Gracias a todos por ese rato inolvidable.

Del IES Vilalonga viajé, de la mano y el vehículo de Darío Pino (de Anaya Galicia), al IES Francisco Aguiar de Betanzos. Allí me aguardaban 200 chicos de 2º de ESO, acompañados de sus profesores, para despejar algunas dudas sobre el libro que habían trabajado: Consumir preferentemente. Fue emocionante verlos llegar al salón de actos con el libro en la mano y cara de expectación. Gracias a Elvira y a Francisco por su espléndido trabajo y por recoger la sugerencia que uno año antes hizo Moure de llevarme hasta allí.
Dejo aquí la presentación de Francisco y algunas fotos que hizo con sus chicos:

En el año 2004, estábamos aquí, como esta tarde, atentos a lo que nos dijera el autor del libro que habíamos leído. Ese día, Gonzalo Moure, no sólo nos habló de Palabras de caramelo; también nos recomendó la obra de un joven autor, Raúl Vacas, de quien, al año siguiente, pudieron leer los alumnos de cuarto de la ESO, cuatro poemas, recogidos en la antología Efectos secundarios, primer volumen de la colección Otros Espacios, un atrevido proyecto editorial de Anaya que no nos cansaremos de agradecer.

Los alumnos anotaron con enojo el título; no obstante, poco a poco, la lectura de los poemas de Juan Bonilla, Santiago Núñez, Silvia Ugidos, también Raúl Vacas, ayudó a desmontar el prejuicio: la poesía no era una cursilería para sensibleros nostálgicos. El curso pasado, jugueteamos en las clases de primero de la ESO con algunos de los poemas de Consumir preferentemente: Peoma, Vademecum, SMS.

El éxito animó a proponer la lectura a los alumnos de 2º y 1º de la ESO. Así que, en Betanzos, este curso, alrededor de 200 jóvenes, empujan el carrito, decodifican SMS, cartas al Ayuntamiento o del Ayuntamiento, notas amarillas, peomas..., conservando, eso sí, el ticket de la oferta del día. Es verdad que, a veces, cuesta entender y da dolor de cabeza o una cierta sensación de mareo, pero, para eso, en el lineal de liquidación de existencias, está Vademecum: una aspirina, un gelocatil o una biodramina bastan. Los antibióticos, ni tocarlos. Este virus de leer poesía, ya está probado, ni debilita ni acatarra.

De modo que, explicadas ya las circunstancias, toca agradecer a Raúl Vacas su presencia, y otorgarle la palabra. Para eso, pulsemos la tecla off del corazón, inmediatamente después de insertar, aunque sea de chocolate, una moneda.

Francisco Rodríguez Coloma
I.E.S. Francisco Aguiar, Betanzos, A Coruña









Anoto aquí la dirección del blog “El oso de las cañerías” donde queda una breve huella de la actividad.

Gracias también a Darío por su trato y su dedicación y por las muchas conversaciones en los trayectos en coche (con música de Loquillo de fondo) o frente a un vaso de vino.

Fue delicioso pasear por la playa de Santa Cristina, en soledad, y buscar algún tesoro entre los restos arrojados por el mar sobre la arena.

Mar, lluvia, faros, gente acogedora, chicos y chicas en los que late la poesía, así es el paisaje de Galicia.

3.2.10

Esto y ESO

Mano sobre mano, palabra sobre palabra, como dijera Ángel González. Así es como he recibido Esto y ESO, libro que hace el número 117 de la Colección Alandar de la Editorial Edelvives y que tengo el gusto de firmar.
Con este libro Edelvives trata de acercar la poesia a los adolescentes, de convertirla en herramienta de trabajo, de crecimiento personal y de aprendizaje.
El libro trata de ser, precisamente, un guiño a los chicos y chicas de la ESO, un modo de mostrarles que la poesía puede estar al alcance de su mano, sin necesidad de que se la prescriba un profesor (cosa que, por otra parte, deberían hacer todos los profesores y no sólo del área o el departamento de Lengua y Literatura).
El libro está organizado en diferentes secciones que se corresponden con las principales materias que se cursan en la Educación Sencundaria Obligatoria. Recuerda, en este sentido, a la Enciclopedia Álvarez o a otros libros que agrupaban en un sólo volumen todos los saberes que debía conocer el estudiante de entonces.
Hay textos que nos introducen en el terreno de las matemáticas, otros nos llevan a reflexionar sobre la propia Literatura y su enseñanza, y otros se adentran en el terreno de la física o la biología.

Ha sido un placer trabajar de la mano de Jorge Hernán Gómez e Ignacio Chao en el proceso de edición.
Revisar los textos uno a uno, encajar las citas que acompañan a muchos de los poemas, organizarlos de la mejor manera posible se convirtió, gracias a Jorge, en una labor creativa y gratificante. De modo que mi reconocimiento, en primer lugar, para él.
Mi agradecimiento, también, para Pilar Careaga quien me invitó a formar parte de la colección Alandar y me abrió las puertas de la editorial. Y a Paloma de la Concha, por contar conmigo en las tareas de formación de profesores.
Pero también aprovecho -como hacen los artistas cuando recogen un premio- para extender mi gratitud a Raquel López y María Sánchez-Tabernero, de A Mano Cultura, que hicieron de Celestinas en mi primera aproximación a la editorial (en el II Congreso de Literatura Infantil y Juvenil) y que correrán la voz de biblioteca en biblioteca y de librería en librería, gracias al gallo del Club Kirico. Y a Gonzalo Moure, el primero que tuvo en su bandeja de correo el libro y que ya hablaba de él antes de su publicación por colegios e institutos (ahora, de hecho, ha pedido 4 ejemplares a la editorial para llevárselos, con fines "evangelizadores" y debajo del brazo, al Amazonas.
Gracias, por último (antes del aplauso final) a Isabel Castaño, mi mujer, por su sobresaliente ayuda en la confección del libro. Y a todos los que crecen día a día a la sombra de un poema.

Aquí os dejo la portada, que nos recibe con una mano abierta, y otros contenidos del libro:




En la contraportada puede leerse el siguiente texto:

Pasa, lector, y ocupa aquí tu asiento,
abre este libro, hojea sus materias,
siente del corazón las cosas serias,
prueba el remedio del conocimiento.

Será la geografía tu alimento,
sangre la nueva historia en tus arterias,
secundarias las fiestas y las ferias,
la biología tu mejor sustento.

Lee cada poema con paciencia,
estudia los idiomas de los besos,
las matemáticas de tu existencia,

y así, cuando conozcas tus excesos
y aprendas a vivir con otra ciencia,
podrás recomendarlo a estos y esos.



En las primeras páginas hay unas palabras para abrir boca:


LECCIÓN INAUGURAL

La literatura en los colegios debería ser un paréntesis
dentro de la actividad diaria, una hora de sosiego en la que
el alumno escucha, piensa en sus cosas o se duerme
mientras el maestro lee en voz alta libros que no tienen
por qué seguir el disparatado orden del canon escolar.

Daniel Pennac



Este libro pretende mostrar y demostrar que cualquier
cosa, por extraña o banal que sea, puede ser un poema.
Todo cuanto nos rodea tiene una naturaleza íntima,
oculta bajo su apariencia. Sólo el poeta y el niño pueden
acceder a las moléculas que determinan su estructura y
desentrañar su significante y su significado, ya sea a través
de la imaginación o de las palabras.
Abramos pues los ojos. Pongamos los cinco sentidos
en las diferentes materias que vamos a abordar en este
breve pero intenso curso poético y que conformarán el
título de nuestro relato académico.
Pero, entretanto, aguardemos con ansia el timbre y salgamos
un rato al recreo:

Hay que ver los cotilleos
que he escuchado en el pasillo
entre pitillo y pitillo,
matrícula y papeleos:
que este año son muy feos
los chavales de mi clase,
que si el finde fue un desfase,
que si aquel con disimulo
me tocó anteayer el culo
al pedir que me arrimase,
que no sé dónde se sienta
el chico del polo negro,
que jolín cuánto me alegro
de que estés hoy tan contenta
porque al fin se diera cuenta
de que estabas coladita,
que si tienes una cita,
que si ya salió la nota,
que el de atrás es un pelota,
que menuda preguntita.
A ver cuándo en el recreo
se habla de Lorca o Neruda,
de Descartes y su duda,
de Vivaldi o de Perseo
y se deja el cotilleo
para las clases tediosas
y a otras cosas, mariposas.
Doy por cerrado este mitin
citando al profesor Keating:
«cortad, desde hoy, las rosas…»

Y un par de botones de muestra:

MADAME BOVARY

La pitonisa leyó la mano de la mujer lectora. En cada
línea adivinó un capítulo de su vida: un comienzo feliz,
un nudo en la garganta y un desenlace trágico.
Desde ese día, la mujer lectora leyó entre líneas.


NANA

Duérmete (una ovejita) mi niña,
duérmete (dos ovejitas) mi amor.
que viene el lobito
peludo y feroz.

Duerme mi niña (tres ovejitas),
y cierra los ojos (cuatro ovejitas)
y sueña en silencio
con estalactitas.

Cuatro angelitos
tiene mi cama, cuatro angelitos
que me la guardan,
uno me da leche,
otro me da lana
y mi niña se duerme
hasta la mañana.

Duérmete mi niña que viene
el coco,
o el diplococo
o el estreptococo
o el estafilococo
y se lleva a las niñas
que estudian poco.

(5 ovejitas).