Pasa al interior y ponte cómodo

7.5.07

A veces ocurren cosas


Ballobar es un municipio de la comarca del Bajo Cinca en la Provincia de Huesca. Un lugar apacible y lleno de vida donde tractores y libros cultivan, por igual, tierras y habitantes. Allí, junto al río Alcanadre, a veces ocurren cosas.

Todas las semanas un grupo de ballobarinas se reúne para leer y compartir su afición por los libros, hábito que, desde hace más de diez años, forma parte de sus ocupaciones diarias y que llevan a la mesa de sus casas como el pan diario.
Alegría, carnicera del pueblo y según Gonzalo Moure auténtica metáfora de Ballobar, es una lectora comprometida y un derroche de júbilo. Al igual que el resto de madres y abuelas que leen juntas, su deseo es contagiar a jóvenes y niños su entusiasmo y hacer posible un mundo mejor. “Más libros, más libres”, dice Moure.
Si atendemos al significado de la palabra “labrar”, podemos considerar la literatura y la ilustración como aperos típicos del pueblo. Porque labrar es trabajar, hacer, formar algo y hoy, Ballobar, es un referente para muchos otros lugares donde la lectura, relegada al ámbito de lo personal, quiere ser un fenómeno colectivo.
Hace apenas unas semanas concluyeron las III Jornadas Aragonesas de Bibliotecas y Promoción de la Lectura y la Escritura en esta localidad. Bibliotecarios, Escritores, Maestros y lectores de todas partes de España pusieron en común sus cosechas literarias. Dichas jornadas, impulsadas por Carmen Carramiñana y Mercedes Caballud con ayuda de Gonzalo Moure, Mariona Martínez, Samuel Alonso y Antonio Martínez, son prueba del compromiso y el esfuerzo diarios por acercar la literatura a la familia, la escuela y la biblioteca de forma activa y duradera.
Y en este empeño maravilloso colaboran madres e hijos, abuelos y nietos, maestros y alumnos, bibliotecarios y lectores. Cada cual aporta su experiencia de vida, su herencia literaria, su trabajo.
Todo en las jornadas pasa por las manos de la gente: desde las presentaciones en las mesas redondas hasta la intendencia. Un claro ejercicio de entrega y generosidad que emociona a todo el que se acerca hasta allí, una gran fiesta (que no feria) del libro sin ninguna pompa ni oficialidad. Una sueño cumplido y aún por madurar.
Humildad, cercanía, cariño, espontaneidad y voluntad conforman el índice de ese gran libro abierto que es Ballobar y del que acabo de leer y vivir el primero de los capítulos.

8 comentarios:

  1. Bonita costumbre la que tienen por allí, ya se podían hacer cosas así en Salamanca.

    Es una pena que el hábito de la lectura se esté perdiendo poco a poco... Que nuestra sociedad piense que por abrir un libro, se nos caiga el alma.

    Viva la LECTURA

    Un beso

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  2. Anónimo5:47 p. m.

    http://www.melillahoy.es/noticia.asp?ref=26329
    Piensan lo mismo al otro lado.

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  3. Que costumbre más bonita, ojala en todos los sitios se hicieran cosas así.

    Debe ser una experiencia inolvidable pasar por ese lugar, aunque tan solo sea una vez.

    Pd: todavía no he ido a ver si veo tu libro, con los exámenes y todo eso no me ha dado tiempo pero prometo ir a verlo como mínimo y si puedo comprarlo que me hace ilusión.

    Besos

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  4. Anónimo8:18 p. m.

    Hola , soy Alegría,de Ballobar. Raul, gracias por tus palabras , caen en mi ánimo como un bálsamo, ya que mi prespectiva de las jornadas es desde la "intendencia" y no las pude disfrutar . Lo que mas me duele ,no aprovechar la oportunidad que las jornadas nos brindan para hacer nuevos amigos , como creo que podemos se mucha gente de Ballobar y tu. Cuidate y vuelve

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  5. Hola!

    Me ha emocionado mucho leer lo que cuentas de Ballobar, de la tierra labrada, de los libros, de la humildad de las jornadas y del júbilo de mi madre.

    Las jornadas reavivan la magia que "Leer Juntos" alberga en su seno, y han hecho descubrir y reconocer el trabajo de muchas mujeres durante mucho tiempo.

    Artículos como este ayudan a seguir creyendo en lo que se hace y en reconocer el valor de "Leer juntos" para nuestra comunidad.

    Leticia de la Alegría.

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  6. Mi querido Raúl: Pedro y yo leemos tus crónicas de Ballobar y ya un libro se nos pega a la boca. Te echamos de menos y queremos compranos unos zancos nuevos para llegar pronto a la hora de estar ahí o tú aquí. Pedro dice España debe nombrar a Rául Vacas como cónsul en el congreso permanente de la anarquía en la palabra. Te queremos.

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  7. Anónimo6:17 p. m.

    ¡Hola Raúl!
    Aquí estoy, casi después de un mes de conocerte en este gran encuentro que vivimos en Ballobar.
    Hace unos días hablé con Stella, a ver si nos centramos y te enviamos las fotos que por cierto, a parte de los niños y la exposición de Media Vaca parece que la cámara no se dignó a centrarse en nada más. ¡Una pena!
    Bueno, bueno... yo venía a agradecerte... el gran descubrimiento de tu poesía. Si no fuese tan despiete te hubiese pedido que me firmases "proceso de amor", pero bueno así siepre cabe que la próximavez que nos encontremos lo hagas, mejor porque así ya lo habré leído. Mi segundo agradecimiento es por descubrirme "El lado oscuro del corazón"... uf... qué grande es ver a A Mario Benedetti recitando en ¿alemán?. De verdad, ya teno nueva película de receta médica contra los silencios de los días tristes.
    No me extiendo más, que esto empieza a parecer un mail.
    Gracias por todo, y esas fotitos de la estación no te las apalanques, eh!!
    ¡Viva Ballobar!

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  8. Anónimo8:35 p. m.

    Por razones que la razón humana desconoce yo escribí, pero veo que no aparece mi comentario.
    Lo intento de nuevo:
    gracias Raúl por ser y por estar en Ballobar, por la línea de relación con se ha creado.
    Los niños y niñas están ilustrando tus poemas, se los aprenden de memoria, se los van a recitar a sus familias en la fiesta sorpresa que les estamos preparando...
    Tienes que volver, porque empezamos a descubrir que podíamos ser cómplices.
    Gracias por tu cariño a Ballobar.

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